Pico Duarte: El día después
Paloma Obando, Costa Rica
Gina Vitali, Argentina
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En la imagen, Paloma y Gina.
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Una vez coronado por los expedicionarios de la Ruta Quetzal BBVA
el pico más alto del "Parayso", bajaremos para visitar
el histórico y fantástico lugar donde arribó
por primera vez el Almirante Cristóbal Colón. Nos referimos
a La Isabela.
¡Al fin, una hermosa playa! pero antes...
Como solidario acto, el día se inició un poco más
tarde, a eso de las 7:00 a.m. y, ¡al agua!.
Un río con agua a una temperatura de 15º C fue el que
nos dio el placer de sentirnos "limpios" y frescos. Seguido
de estos, escuchamos el ya acostumbrado grito de: "preaparados...¡ya!
El cual anuncia que, sin más ni menos, las actividades darían
comienzo; así que en pocos minutos debíamos: desayunar,
buscar las pertenencias guardadas en buses desde el día 24
pasado, y desmontar todo el campamento.
Al ser imposible completar los deberes por la poca velocidad que
el cansancio nos permitía, quedó pendiente desarmar
las tiendas.
Fuímos divididos en tres grandes grupos y otro más
pequeño, al cual permitieron comunicarse con sus familias a
través de Hispasat.
El grupo 1 tuvo la oportunidad de asistir a un taller sobre la yuca,
su preparación y lo importante que es para muchas personas
en ciudades caribeñas, por sus diversas utilidades.
Miguel Quadra-Salcedo compartió con este grupo unos pocos
minutos en los que nos demostró sus conocimientos sobre: "supervivencia
en la selva Amazónica", hablando sobre algunos productos
también conocidos en la República Dominicana.
El segundo grupo practicó un circuito que consistía
en pasos de cuerdas, uno que otro puente, saltos y agua.
El último grupo estuvo realizando escaladas en paredes verticales
con arneses y cuerdas de sostén.
Al finalizar las actividades, se terminaron de desmontar las tiendas
para servir el almuerzo a nuestro grupo y junto con el grupo 13 nos
correspondió llevar a cabo la limpieza del campamento.
Una vez finalizada esta tarea, tomaron todos los grupos sus respectivos
buses y... a la playa.
Continuando con el camino, nombramos 2 personas que por grupo recogieron
un fondo común para comer papas, refrescos... precisamente
fuímos nosotras las encargadas de llevar a cabo esta árdua
tarea; y, decimos árdua por la cantidad de personas comprando,
el recoger el dinero y el poco tiempo; pero, al fin y al cabo comimos
y seguimos.
Un grandioso baño en las tibias aguas de La Isabela fue lo
que precedió a una charla sobre las hermosas estrellas y cómo
estas eran indispensables para los navegantes en la época de
Colón. ¡Algo más que aprendimos! y ¡buenas
noches!
Un saludo a toda nuestra familia y amigos.
